Europa, social y políticamente norteamericana.

LA SOLUCIÓN EN EL PRÓXIMO NÚMERO

Mantener como ejemplo, durante décadas, a una sociedad como la norteamericana, trae consecuencias como las que hoy se viven en Europa, donde las escasas conquistas sociales de los trabadajores y sus mínimos derechos laborales parecían el sostén de un mal llamado “estado de bienestar”, que comenzó a resquebrajarse del todo cuando la usura y el robo plantearon al régimen capitalista su propia imagen: una sociedad que hacía aguas gracias a sus propias leyes económicas.

Hoy, se discute un nuevo rescate del que Grecia es protagonista, en tanto los medios ocultan el valor de Islandia para poner coto a la estafa de la banca privada, metástasis real de un ordenamiento criminal bajo el que los derechos humanos se violentan como los de los animales.

LA MONA LISA TRAS PASAR POR HOLLYWOOD

¿Realmente podemos perder algo más, si es que poseemos algo? ¿Podría darse “un corralito” en Europa? Dicen los expertos que, en el caso improbable de que un banco francés o alemán vaya a la quiebra, los depósitos personales están garantizados por un fondo especial que cubre hasta 100.000 € por persona.

Esto significa que si alguien tiene varias cuentas en el mismo banco, cuyo monto total supere esa cifra, corre el riesgo de perder el resto, ya sean planes de pensiones o de ahorro. No es mi caso, ni supongo que el de cientos de millones de ciudadanos.

¿Y por qué ese continuo balanceo entre el euro y el dólar? ¿Es que alguien duda de que ambas monedas se atacan y sostienen como hermanas siamesas, aunque una de ellas parezca más hermosa que la otra?

 

¿Qué pasará en los EE.UU.? El país se encuentra actualmente en sumido en una deuda más allá de lo que el Parlamento puede permitir. Parece que el verano será largo y cálido, aunque deje helado a más de uno.

Si los demócratas y los republicanos no llegan a un acuerdo antes del 2 de agosto, “el país de la libertad” estará en una situación crítica, tan grave como la de aquel que tiene facturas pendientes, pero no el dinero para pagarlas.

Los millonarios norteamericanos de Forbes o de Fortune, se niegan a que suban masivamente sus impuestos, aunque su patria (a la que claman cuando invaden naciones) pueda hundirse en una profunda recesión. Su patria y su Dios son de color verde y tienen números.

 

Y nosotros, los currantes y pensionistas de la zona del euro, soportamos la posibilidad de que ese mismo tipo de personas, que a la postre son el cáncer de la economía mundial, acaben con las migajas que esta Comunidad de Imitadores de la Basura Norteamericana nos ha impuesto militarmente, disfrazandolo de democracia representativa.

Grecia no es más que un ejemplo de la bestialidad del régimen global. Algunos incluso consideran el escenario de pesadilla: hay doctores que sugieren la expulsión de los “enfermos griegos” de la zona del euro. Son contagiosos.

Pero hay solución: o los trabajadores aceptan el libre despido, el desalojo, el esclavismo light, 56 horas semanales,  pagar por la sanidad, la educación, bajar la cabeza ante el IVA y los impuestos, la tortura o nos pondrán más cadenas que a Espartaco. Cuando la izquierda protesta con la boca pequeña, solo queda el monte.

Cuando era niño, la película de terror que más me hacía temblar, era la posibilidad de que nos volviéramos norteamericanos.

Ahora que pertenezo a la tercera edad, ya no tengo ningún miedo, pero me molesta mucho no poder comprarme una pistola, como hacen en la tierra de la libertad.

http://tenacarlos.wordpress.com/2011/07/21/europa-social-y-politicamente-norteamericana/