EL CRIMEN DE JOSE COUSO, ASESINADO POR EL EJÉRCITO NORTEAMERICANO, AÚN SIGUE IMPUNE
Gilles Jacquier, el periodista de France 2, de 43 años, fue enterrado el viernes en Bernex (Alta Saboya), en una ceremonia a la que asistieron muchos de sus compañeros/as de France Television, asi como el máximo resposable en la dirección, Rémy Pflimlin.
Un funcionario que colabora con una organización de Derechos Humanos en la ciudad siria de Homs, pero que ha querido permanecer en el anonimato para evitar posibles represalias de los grupos terroristas que actuan en el país, declaró que el ataque que costó la vida al camerógrafo y periodista, fue obra de esos mercenarios. Los observadores de la Liga árabe no ha desmentido tal acusación.
El anónimo comunicante expresó su opinión acerca de este tipo de ataques, alegando que no hacen ningún favor a quienes creen que la oposición al gobierno del presidente Bashar al-Assad puede tolerar esta clase de asesinatos contra enviados especiales de medios extranjeros.
Toda la prensa europea recoge el testimonio acusatorio esta mañana, dando por hecho que las palabras de este funcionario reflejan la verdad del atentado.
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