El tono de ciertos tertulianos y líderes de opinión está subiendo y alcanza unas cotas que rozan la estupidez y la legalidad, una vez que la vergüenza y la ética no juegan en este partido, mientras el oficio de periodista sufre una degradación progresiva.
Esta semana me ha tocado escuchar que Zapatero quería imponer el aborto “obligatorio”, debemos entender que con la intención de acabar con la especie humana; que se están violando a miles de niñas en los colegios ante el silencio cómplice de los medios de comunicación, y que la ley de muerte digna y cuidados paliativos persigue acabar con los inválidos y enfermos graves para ahorrar en medicinas. Esto último lo sostiene nada menos que un ex portavoz de Gobierno. Este tipo de sandeces se dicen ante la mirada atenta de otros contertulios sin que en sus rostros aparezca el menor atisbo de sorpresa o duda.
Esta semana me ha tocado escuchar que Zapatero quería imponer el aborto “obligatorio”, debemos entender que con la intención de acabar con la especie humana; que se están violando a miles de niñas en los colegios ante el silencio cómplice de los medios de comunicación, y que la ley de muerte digna y cuidados paliativos persigue acabar con los inválidos y enfermos graves para ahorrar en medicinas. Esto último lo sostiene nada menos que un ex portavoz de Gobierno. Este tipo de sandeces se dicen ante la mirada atenta de otros contertulios sin que en sus rostros aparezca el menor atisbo de sorpresa o duda.
Parece que esta escalada de oligofrenia mediática ultra es internacional. Un ex asesor del primer ministro canadiense dice que hay que matar al fundador de Wikileaks, Julian Assange. Se pregunta por qué no le persiguen como a Al Qaeda o los talibanes. No cuestiona la veracidad del contenido de los documentos publicados recientemente, sino que se muestra indignado porque ahora sabemos que el rey de Arabia Saudita recomendaba bombardear Irán y ha quedado con el culo al aire. No muestra la más mínima compasión por las personas que iban a ser asesinadas por las bombas y cuya vida está en manos de asesores como él. Antes, el presentador de la Fox Bill O’Reilly había pedido que ejecutaran a los que dan información a Wikileaks.
La era de los liberales ya está aquí.
La era de los liberales ya está aquí.
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