¡Qué tristeza y qué pereza tener que hablar de Valencia! Porque, dentro de un mal general, de una crisis exacerbada y de unos gobernantes que nos avergüenzan, lo de Valencia no tiene parangón.
Ahora la única Comunidad cuya deuda ha sido calificada –por Standard & Poors— como bono-basura es la Comunidad Valenciana. La única –y mira que la situación es crítica en todas las comunidades— que tiene la calificación de Grecia. Háganse ustedes idea de la situación económica. Ya ha sido ayudada por el gobierno y tendrá que volver a serlo pronto para que no quiebre. De hecho a eso se debe la visita de Alberto Fabra a la Moncloa. Pedir árnica a su compañero de partido.
Pero siendo grave el estado económico al que la han condenado, la situación política no le viene a la zaga. De Camps, mejor no hablar ya se ha dicho y visto casi todo. Del nuevo president Fabra, decir que ha defendido a la policía en los incidentes con los estudiantes, y a su antecesor, lo que no es poco. De la chulería y desprecio de Carlos Fabra con sus oponentes, ya he hablado en muchas ocasiones. Pero ahí quedan otros de armas tomar.
La violencia fascista demostrada por la policía con los estudiantes, dice mucho también del director de ese cuerpo y de la delegada del gobierno.
A Rita Barberá, le acaba de dar otro palo la Justicia con el tema de los derribos del Cabanyal, además es casi seguro que la llamarán a declarar en el caso Urdangarín, puesto que presuntamente intercedió ante Camps para que el yernísimo hiciera el agosto en esa comunidad. Lo último de la alcaldesa de la risa floja ha sido impedir a unos ancianos que puedan recuperar los restos de sus padres.
Pero hay más, voy a hablar de un tipo increíble, al que ya le dediqué una entrada, cuando era vicepresidente del gobierno valenciano por insultar a la diputada Mónica Oltra.
Hoy, al antaño director de la policía con Aznar, Juan Cotino --después vicepresidente del gobierno y ahora presidente de las cortes valencianas-- se ve que no le gusta que le hagan oposición y que tiene un “especial cariño” a la diputada de Compromís, Mónica Oltra, porque ha vuelto a demostrar con ella su talante totalitario y fascista.
Primero, hace unos días, recriminó a la diputada que llevara una camiseta, según él, no adecuada, en la que se podía leer:
NO NOS FALTA DINERO, NOS SOBRAN CHORIZOS.
Y como se debió dar por aludido, la expulsó del parlamento, lo que hizo que se marchara la oposición en pleno.
Pero no contento con esto, días después, veo aquí que el opusdeista Cotino no permite que se critique a la Iglesia, ni a nadie que pertenezca a ella. Ante una proposición no de ley presentada por Esquerra Unida para abrir una investigación sobre los niños robados, el tal Cotino, ha vuelto a ejercer de censor mayor y ha cortado la palabra y ha llamado al orden otra vez a Mónica Oltra –qué cruz tiene esta mujer, teniendo que aguantar a este franquista— por haber citado la Casa Cuna de Valencia y criticar a la superiora de esa maternidad religiosa al no entregar los documentos y encubrir los posibles casos de niños robados. Esa monja superiora es sor Aurora, quien tiene la medalla de Oro del mérito y es hija Adoptiva del Ayuntamiento de Valencia.
(El vídeo es una prueba decisiva del autoritarismo y la ineptitud de este individuo. No está en castellano, pero si no se entiende, se puede leer la traducción en este enlace)
Como han podido ver, el Señor Cotino es quien decreta lo que es decoroso y además prohíbe hablar de personas que no estén presentes. Probablemente no tiene buena memoria, porque debería acordarse de las veces que han hablado mal del gobierno anterior y de los sindicatos, sin estar presentes. Es tremendo pensar que en un parlamento “democrático”, quien lo preside te diga lo que se puede o no decir, cargándose la libertad de expresión de un plumazo. Y más en un tema tan sensible y serio como el de niños robados.
Desde luego, lo de los peperos de Valencia es de traca, y no precisamente de traca fallera. Una vergüenza que cada vez hace más difícil pensar que voten a esta gente por mayoría absoluta. ¿Por qué?
Desde aquí mi total solidaridad con esta diputada valiente y con todos los diputados de la oposición en el parlamento valenciano, que tienen que aguantar a personajillos dictadores y soportar una censura injusta y vergonzosa.
Se están cargando la Comunidad Valenciana, tanto económica como políticamente. Es triste ver a una de las regiones españolas que han estado a la cabeza del país, hoy hundida en la miseria por la gestión dilapidadora, totalitaria y vergonzosamente fascista de sus gobernantes.
Salud y República
http://rafa-almazan.blogspot.com/2012/02/valencia-bonos-y-gobernantes-basura.html
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