T. Lozano Lubary - Redacción Canarias Semanal
Ayer se cumplieron 38 años de la histórica "Revolución de los Claveles" que liberó aPortugal de la dictadura salazarista, que había prolongado su existencia durante varias
décadas. Cada año la Asamblea de la República celebra una ceremonia en la que se conmemora aquella significativa gesta en la que la acción de los militares contribuyó de manera decisiva a la liberación del pueblo portugués.
Sin embargo, este año la celebración no contó con la presencia de los militares que participaron en aquellos históricos acontecimientos. El pasado lunes, Vasco Lourenço, uno de los capitanes que se sublevó en contra de la dictadura y hoy presidente de una Asociación que agrupa a la mayoría de los militares que se levantaron en armas, anunció que él y sus compañeros de armas no participarían en el acto como expresión de protesta por la deriva derechista que está tomando el país.
La "Asociación 25 de Abril", que preside el antiguo capitán rebelde, Vasco Lourenço, hizo público un manifiesto en el que bajo el título "Abril no se desarma" exponen las razones por las que han decidido ausentarse de la ceremonia que estaba previsto se celebrara en la Asamblea de la República. "Las medidas y sacrificios impuestos a los ciudadanos portugueses - dice el manifiesto -sobrepasan los límites de lo soportable… El rumbo político que ha tomado el país protege los privilegios, agrava la pobreza y devalúa el trabajo. Portugal no ha sido respetado como un igual, en la construcción institucional común de la Unión Europea." Los militares expresan su irritación ante la arrogancia con la que poderes externos están tratando a su país. En el contenido del manifiesto, los heroicos militares del 25 de abril que derrocaron a la dictadura militar instaurada por Oliveira Salazar, hacen una referencia directa a las normas impuestas por la llamada "troika comunitaria" -Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional - que han impuesto aPortugal condiciones leoninas y humillantes por el préstamo firmado en su día por el gobierno del socialdemócrata José Sócrates, y hoy ejecutadas con toda crudeza por un ejecutivo de perfil político ultraconservador.
Vasco Lourenço, en un discurso pronunciado ante miles de personas en Lisboa que el pueblo no puede ser culpado por la crisis y que los elegidos no están al lado de los portugueses.
"El poder real en Portugal no está siendo elegido por los votantes. Y quienes han sido elegidos ya no están representando a la sociedad portuguesa".dijo Vasco Lourenço. En un discurso que duró casi media hora en la Plaza de Rossio, el militar justificó la posición adoptada por la Asociación el 25 de Abril de no asistir a las celebraciones oficiales en el Parlamento. En uno de los pasajes del discurso del militar este manifestó que era necesario"poner fin a este estado de cosas".
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